Plantilla Baloncesto Cambre Revesduyo. Temporada 2014/2015
(Fuente: CB Cambre)
El pasado sábado, nuestro equipo de la categoría júnior visitaba al equipo de Compañía de María para disputar el partido correspondiente a la 4ª jornada de la 2ª fase de la competición.
Compañía de María: Feal, P. (3), Rubio, A. (2), Sal, A. (-), Veiga, L. (5), Rodríguez, P. (28) – 5 inicial – Fernández, A. (5), Rocha, O. (2), Sánchez, A. J. (2), García-Ramos, C. (3), Orro, O. (7), Vázquez, E. (3).
Baloncesto Cambre Revesduyo: Jorge Rodríguez (5), Luciano Robledo (12), Rubén González (2), David Torreiro (7), Elías Ruíz (2) – 5 inicial – Abel Castro (-), Santi Vila (-), Pelayo Fernández (-), David Blanco (8), Martín Martínez (-).
Árbitros: Beltrán, E. y Parga, D. Expulsaron por faltas a Elías Ruíz por parte de Baloncesto Cambre Revesduyo.
Parciales: 12-8, 24-19 (descanso), 48-25, 60-36 (final).
Asistencia: Treinta espectadores.
Para este partido, el entrenador Borja López, contaba con las bajas de Gabi Rodríguez, por motivos personales y de Brais Lago por problemas físicos.
El partido comenzaba igualado por parte de ambos equipos. El campo de juego no permitía acciones muy rápidas, por lo que las jugadas más abundantes eran valores interiores a los pívots.
El equipo local aprovechaba la talla de sus jugadores interiores para volcar sobre ellos sus acciones de juego, hecho que hacía que los cambreses tuvieran problemas para contenerlos. Así mismo, en defensa optaron por defender en zona prácticamente en la totalidad del encuentro.
Mientras, Baloncesto Cambre encontraba a los jugadores interiores muy acertados, destacando a David Torreiro en ataque. Por otro lado, en defensa los cambreses concedían muchas facilidades dada la poca actividad de las ayudas y la falta de comunicación en las acciones de bloqueos del rival. A esto se le sumaban ciertos problemas a la hora de cerrar el rebote defensivo, dominado por Compañía de María en todo el encuentro (12-8 min 10).
En el segundo cuarto, el equipo visitante mejoraba sensiblemente, sobre todo en el juego ofensivo, atacando de una manera más clara y ordenada la defensa en zona local. Sin embargo, en defensa continuaban sufriendo para frenar las acometidas locales, lo cual hacía que se recurriera a las faltas y, en consecuencia, conceder tiros libres adicionales al conjunto rival (24-19 min 20).
Tras el descanso, con sólo cinco puntos de diferencia entre ambos equipos, Baloncesto Cambre se iba del partido, mientras que el equipo local continuaba defendiendo en zona y usando a sus interiores, cargando mucho el rebote de ataque, teniendo así varias posesiones de manera consecutiva. Los cambreses cometían numerosas faltas para pararlos, por lo que varios jugadores decisivos se veían obligados a permanecer en el banquillo.
Los locales seguían sumando muchos de sus puntos desde la línea de tiro libre, lo que hacía que se aumentaran las distancias en el marcador. Por otra parte, los nuestros, no solo empeoraban en defensa, sino que en ataque no se jugaba con ningún criterio, no lograban mover el balón rápido, no trataban de romper las líneas de presión defensiva y las pérdidas de balón se multiplicaban con respeto a los dos anteriores cuartos. Tampoco conseguían sacar ventaja de las faltas que hacían los locales, fallando muchos tiros libres y no forzando más en acciones de 1 contra 1 (48-25 min 30).
Ya en el último cuarto, los jugadores de Baloncesto Cambre mejoraban ligeramente su juego con respeto al anterior cuarto. En defensa, presionaban más las líneas de pase rivales, consiguiendo robar algún que otro balón. Los locales también tenían que circular más sus acciones de juego para encontrar ventaja, sus porcentajes de acierto se reducían y no conseguían romper a canasta con tanta facilidad. Pese a esto, seguían sumando, lo que impedía que los cambreses recortaran distancias.
En ataque, el conjunto de Borja López, jugaba de una manera más rápida y directa para buscar el aro y no dar tiempo a los rivales a colocar su defensa en zona. Muy acertados y decisivos en este aspecto estaban David Blanco y Luciano Robledo, consiguiendo romper a las defensas locales y con gran acierto en los tiros libres (60-36 min 40).
